El futuro está en la formación II

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El futuro está en la formación II

La semana pasada abordábamos el tema de la formación como una tarea indispensable para poder encontrar empleo. Esta semana queremos hacer referencia a lo importante que es la formación dentro de la empresa.

Una entidad que cuenta con empleados formados, además de aportar una ventaja competitiva por el hecho de contar con personas con conocimientos especializados, supone una diferenciación considerable de la competencia, lo que supone un fuerte valor añadido para el futuro de la empresa.

Muchas veces se considera que la formación es una pérdida de tiempo, que no sirve y que solo es relevante para un determinado periodo o para una acción concreta dentro de la empresa. Esto es un error.

Una buena formación, trabajada y constante supone a la empresa una competitividad relevante puesto que mejora la optimización y también los procesos internos empresariales.

Siempre se ha dicho que la capacitación del personal de una empresa es condición necesaria para poder sacar el máximo rendimiento y alcance el camino de la excelencia y los buenos resultados. Todo esto parece una utopía y por eso muchas empresas dejan de lado este detalle.

La realidad es que cada vez más empresas toman conciencia de lo importante que es la formación e incluso muchas de ellas ya tienen un departamento de Formación propio donde se gestionan todos los aspectos necesarios para la formación de los empleados.

Cierto es que muchos empleados pueden tomarlo como un “descanso” de las tareas diarias e incluso un entretenimiento, pero otros, lamentablemente, lo adquieren como una obligación y no aprovechan al 100% la oportunidad que se les brinda.

En función del rango de edad donde se quiera trabajar la formación, podemos encontrar ciertas dificultades para que los empleados tomen conciencia de la importancia que tiene el reciclaje y la actualización de conocimientos.

Actualmente, el concepto de globalización establece que todo el mundo puede realizar todas las tareas, en cualquier lugar y con costes similares. La idea es apostar por ofrecer una ventaja competitiva para convertirse en una empresa de referencia y con empleados orgullosos de pertenecer a ella. Contar con empleados comprometidos, que consideren que la empresa apuesta por ellos y que trabaja su potencial hará que las personas ofrezcan lo mejor de sí mismas y ofrezcan mejores resultados.

Se dice que el trabajo de calidad escasea, existen datos. Pero la realidad es diferente. Diariamente muchas vacantes se quedan sin cubrir porque las empresas no encuentran el candidato idóneo o bien no dan con el perfil adecuado y esto va enlazado a un nivel de especialización necesario y ligado a la formación directamente.

La necesidad formativa es un aspecto muy importante y hoy en día es un peso para la supervivencia empresarial, puesto que la competencia es muy alta, especialmente en algunos sectores y por ello, una buena formación es lo único que ofrece a la empresa la garantía de futuro que necesita.

No hay que tener miedo a emplear dinero y tiempo en formar a los empleados. Existen muchas empresas que ofrecen una formación especializada en función del sector de cada empresa. Una formación de calidad ofrecerá resultados a futuro que demuestren que los medios invertidos generan esa gran ventaja competitiva necesaria.