Ser un buen líder te ayudará a mejorar como persona

PorMerche

coherencia, Comunicación, equipo, líder, Liderazgo, motivación

Ser un buen líder te ayudará a mejorar como persona

¿Sabes ser un buen líder? Una de las habilidades más demandadas, especialmente en puestos de alta dirección, es el liderazgo.  Ante los demás, cada palabra y cada acción que realizamos nos define. No importa cómo seas capaz de definirte tú, las palabras que utilices para hablar de ti y tu forma de ser, son los demás los que te van a definir en base a las acciones que tengas hacia ellos.

A veces, en entrevistas de trabajo para puestos que requieren esta cualidad, pueden preguntarte ¿Has tenido equipos a tu cargo? ¿Crees que podrías ejercer como líder? Y uno contesta como buenamente puede en base a la experiencia que trae de tiempos anteriores.

La mayoría de las veces se confunde el concepto de ser jefe con ser líder. Uno puede tener el cargo de “jefe” sin saber cómo ser un buen líder. El simple hecho de mandar para que los demás obedezcan no te hace líder de un equipo. Para ser líder, debe existir una motivación en las personas que tienes a tu cargo. Se debe crear un ambiente donde los que trabajen contigo sientan que son parte de un equipo que funciona, ser líder significa saber delegar, dejar que los demás aporten sus ideas y por qué no su experiencia. Eso es lo que hace grande a un equipo, que a fin de cuentas, será el que de vida o muerte a tu liderazgo.

La clave para que esto funcione es la coherencia. Aunque parece algo fácil, la gestión de un equipo no lo es. El primer día que te incorporas a un trabajo, empiezas a aprender una serie de pasos y guías para desenvolverte de forma eficaz dentro del mismo. Cuando trabajas con más personas, debes saber que, aunque cada uno tenga su forma de hacer el trabajo, la clave es que todo el equipo reme en la misma dirección.

Si quieres ser un buen líder, se coherente. La ausencia de coherencia es algo que un equipo no perdona. Si dices que vas a hacer una cosa y terminas tomando decisiones distintas, perderás el hilo y la confianza de tu gente y, por tanto, perderás tu capacidad de liderazgo y a tu equipo.

Es importante saber qué quieres de tu equipo y el camino a seguir para conseguirlo y hacerle saber qué esperas de él. Además de la coherencia, la comunicación es esencial para que tu equipo funcione. Deja que ellos opinen, que hablen de lo que sienten, y al igual que debes hacerles saber qué es lo que esperas de ellos, escucha qué es lo que ellos esperan de ti.

No hay mejor crítica que la que te de una persona que trabaja contigo, aunque en escala de puestos se encuentre por debajo de ti, no deja de ser persona y puede ayudarte a mejorar aspectos que tú no hayas visto o no le hayas dado la importancia que necesita y quizá eso te ayude a mejorar, ya no solo en lo laboral, sino también en lo profesional.

Siempre podemos aprender de todo el mundo por mucho que tenga un puesto diferente. La experiencia en cada campo es valiosa para aportar a un equipo la sinergia que necesita.

Ser un buen líder no es tarea fácil. En ocasiones las cosas no van bien y existen desviaciones. Puede suceder que en el camino observes que los esfuerzos realizados no sirven o no son suficientes. No te rindas. Pide ayuda, delega, escucha, déjate ayudar. Esas son las claves para que algo funcione.

Como dice Chiavenato (1993), «Liderazgo es la influencia interpersonal ejercida en una situación, dirigida a través del proceso de comunicación humana a la consecución de uno o diversos objetivos específicos».

Sé capaz de pedir a los demás que hagan algo que tú eres capaz de hacer, es decir, sé su mejor ejemplo. Esto hará que tu equipo te responda de la forma que tú esperas.

¿Quieres mejorar como líder y esto no te parece suficiente? Empieza mejorando por ti. Cuida detalles, analiza situaciones, piensa en lo que puedes mejorar. Como se ha dicho antes, pide ayuda si la necesitas y ante todo, escucha a los demás y aprende aquello que creas que es bueno para ti.

No es mejor quien está más por encima, sino aquel que puede enseñarte un camino que tú no sabes o no conoces. No trates de hacerlo todo tú y a tu manera. Escucha y mira a tu alrededor porque siempre habrá alguien dispuesto a ayudarte.

No te cuelgues una simple etiqueta de Jefe o Coordinador de, haz que tu puesto se complemente con grandes acciones, porque esas grandes acciones te harán una gran persona.

De lo contrario, por muy bien que lo hagas, si no sabes ser líder, no tendrás a tu equipo de tu lado. Puede que llegues lejos, pero siempre serás pequeño.